lunes, 29 de octubre de 2012

Dejad que se abra el telón

Érase una vez, en un país de cuento, una isla coloreada por la imaginación de sus lugareños, donde un joven vivía un amor idílico con una joven de una aldea cercana. Podríamos imaginar la vida de ambos como un telón, siempre abierto, donde a pesar de las vicisitudes se querían y se amaban, unos días más que otros, por supuesto. Nada en esta vida tiene porque ser perfecto.

Pero un día ella decidió cerrar el telón, él lloró, pataleó y le dijo una y otra vez que estaba equivocada. Y con el tiempo se demostró, y ella intentó tirar de la cuerda, pero él se resistió, los engranajes estaban oxidados. Pero siguió insistiendo y el aceptó a dejarla entrar de utillera, de tramoyista, poco a poco, haciéndole sin querer mucho daño a ella, e inflingiéndose también mucho daño a sí mismo. Pero, merecía la pena.

Un día empezó a olvidar el pasado y el telón se abrió, el tiempo justo para que ella pudiera pasar entre las pesadas telas de su vida, y decidió decorarla poco a poco. Y el telón se fue abriendo, a golpe de corazón, hasta que un viaje les alejo y él se dio cuenta de que quería llegar más lejos que antes, que quería quererla más que nunca y arreglarlo todo, una vida juntos.

Supuso entonces, que es la distancia la que deja que veas la gran imagen, donde todos los puntos quedan conectados.Y también pensó, que no hay gran historia en la vida escrita sin sudor, lágrimas y sangre, aunque sean errores de ambos.

Así que decidió dejar el telón abierto, y salir corriendo al escenario, a bailar, a cantar y a ser felices...

lunes, 22 de octubre de 2012

Era primavera, pero el cielo no lo sabía, y lloraba. Mientras tanto una pareja corría por la ciudad, ella intentaba refugiarse de la lluvia pero él tiraba de ella riéndose, obligándola a mojarse. A él le gustaba la lluvia, a ella los porches, a los dos, el otro.

Corrieron y corrieron, besándose por toda la ciudad, mojándose, viviendo la intimidad de los portales. No pararon de besarse hasta llegar a su refugio y abandonarse el uno al otro.

Y por la mañana floreció un nuevo día.

martes, 26 de junio de 2012

¡¡Qué pena de humanidad!!

Lienzo plano, la pared. Y una caja de tizas de colores. Sueño de niños que desean imaginar un mundo, sueño de niños que sueñan con atravesar la pared y cruzar a su mundo imaginario. Se alejó, trastabillando, apenas había aprendido a andar y ya iba a desarrollar su primera obra de arte, ¡¡su madre iba a estar tan orgullosa!!

Empezó pintando un gran edificio, rectangular, lleno de ventanas. Cogió verde y le puso enredaderas, y plantas en el techo. Dibujó gente que entraba y salía, con muletas, vendadas, y encima una gran cruz roja. Un hospital.

Luego otro más pequeño, con columpios y una fuente. Una pizarra en un patio, y niños jugando. Ese sería un colegio.

Ahora un parque, lleno de perros y gente jugando feliz. Una universidad con universitarios charlando en el césped. Una biblioteca donde había una tertulia. Una cafetería llena de gente en vaqueros. Un bar con gente tomando cerveza y hablando. Una iglesia donde se repartía más comida que hostias. Una gasolinera donde se enchufaban los coches, aviones y zepelines surcando los cielos. Una estación de trenes, bicicletas en un carril bici, un autobús...

¡¡Qué pena que sus sueños no se fueran a hacer realidad!! ¡¡Qué pena que su madre no hubiera luchado por hacer ese mundo realidad!! ¡¡ Qué pena conformarse !! ¡¡Qué pena de humanidad!!

miércoles, 30 de mayo de 2012

La vida es como el teatro, está hecha de sueños de locos desvelados que solo quieren desvanecer la línea entre lo real y lo irreal. 

Y sino les dejáis soñar, no os dejarán dormir. 

miércoles, 16 de mayo de 2012

Y nos llamamos sociedad

La sociedad es el conjunto de individuos que interaccionan entre sí y comparten ciertos rasgos culturales esenciales, cooperando para alcanzar metas comunes.
Wikipedia

Nos enseñan caramelos, desde lejos y envueltos, y luchamos por conseguirlos pisoteándonos. Y nos llamamos sociedad

Nos quitan derechos, mientras miramos los anuncios o pensamos en beber este fin de semana. Y nos llamamos sociedad.

Somos individuales, formamos grupos cerrados puntualmente que se disuelven rápidamente. Y nos llamamos sociedad.

No respetamos a la gente que luchó por lo que ahora tenemos, ya que seguimos sentados mientras nos pisotean. Y nos llamamos sociedad.

No nos unimos firmes contra las injusticias, no repartimos lo que es de todos, no intentamos ser más equitativos sino que soñamos con lujo y riquezas. Y nos llamamos sociedad.

Y los jóvenes, no nos movemos para demostrar al mundo que ha envejecido, no usamos nuestra fuerza y nuestra "formación" para cambiar las cosas, porque creemos equivocadamente que no podemos cambiar nada. Vivimos sentados, chillando, sin tomar las oportunidades para cambiar las cosas. Y nos llamamos sociedad.


suciedad.1. f. Polvo, manchas, grasa o cualquier otra cosa que ensucia.2. f. Inmundicia, porquería.3. f. Dicho o hecho sucio.
RAE 

Suciedad por sociedad, porque hasta que no hagamos algo todos juntos, no seremos más que inmundicia, porquería. 

sábado, 28 de abril de 2012

Y se acercan, y se alejan, y se alejan y se pierden. Y siempre la misma historia, por tener miedo de equivocarse...


martes, 3 de abril de 2012

"Nunca dejes de sonreír, ni siquiera cuando estés triste, porque nunca sabes quien se puede enamorar de tu sonrisa."

Se sentía guapa, sencillamente, guapa. Se miraba al espejo y se veía irresistible, se había despertado en uno de esos días en los que sentía comerse el mundo. Se acercó y se miró los ojos, de un precioso azul con destellos lavanda, se alborotó un poco sus rizos rubios pareciendo un poco más salvaje de lo normal.

Marchó desde el baño hasta su cuarto desnuda, moviendo las caderas como las bailarinas orientales y abrió el armario. ¿Qué se pondría hoy? Se decidió por una camiseta de tirantas y unos vaqueros, un collar con un amuleto de madera regalo de un amigo de la playa, y una fina chaqueta de entretiempo. Se vistió apresuradamente y se miró en el espejo. Sí genial, sencillamente genial.

Se calzó los zapatos, cogió la bandolera, se despidió con un beso de su madre y bajó las escaleras. Caminó por la acera dirección a la escuela, feliz, sonriente, y decidió que iba a ponerle banda sonora a su día cuando alguien se la puso por ella. 

- ¡¡Gorda!! 

Desde un coche unos chicos le habían gritado y se alejaban entre risas. Se le cambió el semblante, se puso seria y siguió caminando. Hoy no iba a ser un buen día, definitivamente tampoco hoy sería un buen día...